La historia de Rocky

La historia de Rocky

El cerebro humano está programado para focalizarse más en las amenazas del entorno y en recordar los hechos negativos, esto no es para amargarnos la vida, sino que es un mecanismo que lleva miles de años y que nos ha permitido sobrevivir a lo largo de este tiempo, ya que esto es una forma de defensa. Si bien es una forma de cuidarnos, hace que pasemos la vida enfocándonos en lo negativo y dejando de lado las cosas positivas de nuestro entorno, hoy queremos contarte la historia de Rocky, que inició de una forma cruel, pero que con la acción de una persona cambio, las cosas buenas valen la pena ser contadas. 

El día 30 de junio del presente año, inició de forma habitual para Claudia, dejándose llevar entre las responsabilidades de la familia y el trabajo, hasta que en su camino se cruzó Rocky, un perro de raza dogo argentino, grande, color blanco y con una mirada triste. Del pasado de Rocky no hablaremos mucho, solo basta decir que se encontraba en muy malas condiciones, desnutrido, con cicatrices en su piel, había perdido un ojo, le costaba ponerse de pie, y parecía que ya se había rendido ante un mal destino. Claudia no pudo ser indiferente, no pudo dejarlo en el lugar donde se encontraba, lo sacó de ahí y lo llevó a su casa, es aquí donde comenzó un largo camino de recuperación.

A pocos días de llegar a su nuevo hogar Rocky comenzó a cambiar, comenzó a mover su colita, a acostumbrarse a sus demás compañeros, a tener cuidados. Han pasado casi 3 meses, y podemos afirmar que es otro perro, subió de peso, ya no se le notan sus huesos. Si bien aún tiene dificultad para levantarse y caminar, no es como antes, su colita se mueve de forma constante y su mirada ya no es de pena, sino de cariño y agradecimiento.

La vida de Rocky cambió gracias a la acción de una persona que no pudo ser indiferente, y que tomó la decisión de ponerse en movimiento. Hoy Claudia se transformó de hogar temporal en hogar definitivo para Rocky, viven felices junto a sus demás compañeros. Esperamos que esta historia se repita muchas veces, porque el amor sana, el amor salva.